viernes, 14 de enero de 2011

30 de Septiembre



El 30 de septiembre del 2010, Ecuador vivió una crisis política cuando miembros de la tropa de la Policía Nacional del Ecuador iniciaron una protesta en sus cuarteles suspendiendo su jornada de labores, bloquearon carreteras y además impidieron el ingreso al Parlamento en Quito. A esto se sumó un grupo de elementos militares que bloquearon la pista del Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre. Estas medidas de protesta se realizaron como parte del llamado a huelga nacional policial contra la Ley de Servicio Público aprobada el día anterior, en una reforma laboral del sector público que supuestamente afectaba a los policías.

El Presidente de Ecuador, Rafael Correa, acudió al regimiento de policía, y dio un discurso en el que les aseguró que no se iba a dar marcha atrás con la ley en cuestión. Esto molestó a los policías en huelga lo que originó una situación caótica en donde el Presidente resultó agredido con una granada de gas lacrimógeno. Además resultó lesionado de una rodilla reciéntemente operada. El Presidente fue apartado con dificultades del tumulto y llevado hacia el hospital del cuerpo de policía, este edificio fue luego rodeado por policías inconformes. Correa alegó que estaba secuestrado y declaró desde allí un estado de excepción que movilizó a las Fuerzas Armadas del Ecuador a las calles argumentando que un golpe de Estado se estaba llevando a cabo y responsabilizando a la oposición.

domingo, 9 de enero de 2011

Imaginarios de Quito




Los imaginarios no son otra cosa que la realidad que percibimos haber vivido, sentido y experimentado, lo que a su vez, nos lleva a vivirla. En otras palabras, nosotros construimos los imaginarios y luego ellos nos habitan para que podamos actuar.

En esa perspectiva Quito tiene imaginarios fundacionales que definen la esencia de sus habitantes: el primero que viene de la misión geodésica de 1736 que determinó el lugar equinoccial de la ciudad de Quito y el nombre ecuatorial de nuestro país: la mitad del mundo. El segundo que viene de los siglos de la historia y de la condición perpendicular de los rayos solares, y nos llevan a un orden urbano y a una cotidianidad canicular: mitad del tiempo. Y el tercero, la localización entre volcanes activos y pasivos, donde sobre sale la presencia del Pichincha como lógica defensiva estratégica a la hora de la conquista y la independencia.

Los tres casos nos presentan una situación de sumo interés: históricamente la ciudad le dio la espalda a su origen, lo cual condujo a la existencia de este emblema y memoria de la ciudad y que el imaginario lo negó.

Hoy día los que han nacido por la emigración de los años de la crisis, producen cambios notables en la realidad-imaginario. La mitad del mundo se reposiciona en la realidad y el imaginario gracias a las remezas económicas y culturales; así como a la aproximación de los territorios distantes con nuevas formas de representación política. No se diga respecto de la temática del tiempo, donde el tiempo real lo introduce la tecnología: celulares, Internet, cámaras de fotos, etc.  
En otras palabras los imaginarios urbanos fundacionales no son estáticos; de allí que no se puede negar la existencia de una característica central, pues tienen una geometría variable del tiempo y del espacio; de lo perdido y lo deseado, lo cual quiere decir que los imaginarios configuran el patrimonio cuando lo producen y lo viven.

Pero también quiere decir que los imaginarios fundacionales deben integrarse a las políticas públicas porque la conquista de los deseos de los imaginarios es un hecho político. No hacerlo es desconocer lo que sus habitantes piensan.

La Navidad

Como una de las fiestas más importantes del Cristianismo, junto con la Pascua y Pentecostés. La Navidad se celebra el 25 de diciembre por la Iglesia Católica, la Iglesia Anglicana, algunas otras Iglesias protestantes y la Iglesia Ortodoxa Rumana; y el 7 de enero en otras Iglesias Ortodoxas, ya que no aceptaron la reforma hecha al calendario juliano, para pasar a nuestro calendario actual, llamado gregoriano, del nombre de su reformador, el Sumo Pontífice Gregorio XIII.

Los angloparlantes utilizan el término Christmas, cuyo significado es “misa de Cristo”. En algunas lenguas germánicas, como el alemán, la fiesta se denomina Weihnachten, que significa “noche de bendición”. Las fiestas de la Navidad se proponen, como su nombre indica, celebrar la natividad, es decir el nacimiento de Jesús de Nazaret.
Alrededor de la liturgia de Navidad se ha formado una serie de costumbres folklóricas que han contribuido a crear un ambiente festivo en la intimidad de las familias. Ya en el Siglo V se compusieron cantos populares sobre el misterio de la Encarnación, inspirados en la teología y la liturgia de Navidad. Cuando, en el siglo XIII, San Francisco de Asís y sus discípulos propagan la devota práctica de construir "belenes" en las iglesias y en las casas, se extienden los villancicos de Navidad, caracterizados por el tono sensible e ingenuo de sus letras y de sus melodías que se refieren preferentemente a los sentimientos de la Virgen y de los pastores ante la pobreza que Dios ha escogido al tomar un cuerpo humano.

Como para expresar visiblemente el significado de la "iluminación" obtenida por el nacimiento de Jesucristo, desde antiguo se introdujo el hábito de encender fuegos durante la noche de Navidad, reemplazando tradiciones precristianas. El alumbrado extraordinario de los lugares públicos durante el tiempo de Navidad se ha inspirado en esos usos.


En el caso de la Navidad, lo más importante de las tradiciones y costumbres no es sólo el aspecto exterior sino su significado interior. Se debe conocer por qué y para qué se llevan a cabo las tradiciones y costumbres para así poder vivirlas intensamente. Este es un modo de evangelizar.
Existen muchas tradiciones y costumbres tanto del Adviento como de la Navidad, las cuales nos ayudan a vivir el espíritu navideño; sin embargo, debemos recordar que este espíritu se encuentra en la meditación del misterio que se celebra.

Taurino


Cuando queremos identificar nuestra cultura con una simbología que la caracterice inequívocamente, sin duda todos pensamos en la tauromaquia, en el mundo del toro, en los toros, en la lidia. Sin embargo son las pocas cosas que todavía nos unen y de las que probablemente podemos hablar públicamente sin temor a causar incomodidad.
A pesar de nuestras diferencias de ideas religiosas, políticas o deportivas; los toros son el único concepto sociológico que nos une mayoritariamente. En los toros no importa que seas rico o pobre, de derecha o izquierda; todos estamos unidos por una pasión común.
Como parte de la cultura española, la tauromaquia tiene una tradición milenaria española, e incluso elementos de las antiguas culturas orientales. Antes de la corrida, al toro bravo o de lidia se le trata mucho mejor que a los toros de matanza de la bioindustria.


La corrida de toros es una muestra del aprecio y respeto de la fuerza del animal. Las corridas de toros no se ven como deporte, sino como una mezcla de arte, baile y muestra de ‘virilidad’.
A manera de símbolo religioso, las corridas de toros pasan a ser una lucha entre el bien y el mal, donde el toro representa el mal; los toros han sido creados para luchar contra el hombre o torero y morir en esa lucha.

sábado, 8 de enero de 2011

Gustavo Garzón

Gustavo Garzón, narrador y crítico literario, constituye una figura más en la lista de los desaparecidos sociales de 1990. Nació en 1958, obtuvo una licenciatura en Estadística y un doctorado en Literatura.
 
 
Narrador y crítico literario. Perteneció al Taller de Literatura de la Casa de la Cultura Ecuatoriana coordinado por el novelista Miguel Donoso Pareja. Fundador del colectivo editorial "La Mosca Zumba", en cuya revista publicó varios textos. Se dio a conocer en el suplemento "La liebre ilustrada" de diario El Comercio con la publicación de artículos de crítica.

Desapareció en noviembre de 1990 después de haber sido sobreseído y excarcelado por una supuesta tenencia ilegal de armas y haber militado en un grupo político clandestino. Hasta la fecha no se tiene indicios de su paradero. 

Gustavo Garzón, al decir de Donoso Pareja, era un "excelente escritor".


Bibliografía

Cuento: Brutal como el rasgar de un fósforo (Quito, 1991); Del virus humano y su circunstancia (Guayaquil, 1992).
Ensayo: Coplas populares del Azuay (Quito, 1987). Consta en las antologías: Paralelo cero, narrativa joven del Ecuador (México, 1982).
Nueva narrativa ecuatoriana (Revista Hispamérica, Gaithersburg); Libro de posta (Quito, 1983); Quito: del arrabal a la paradoja (Quito, 1985).